TIEMPOS DE NERVIOSISMO



La higiene se convirtió en una auténtica obsesión de la opinión pública hacia 1930. Hace nueve décadas se inauguraba en Dresde el nuevo edificio del Museo de la Higiene, con una muestra permanente que daba a conocer todos los avances en temas de medicina, instalaciones sanitarias, desinfectantes, cuidado del cuerpo, tecnología quirúrgica, balnearios medicinales, cosméticos, etc. 
Los 20 son también el momento de auge de la firma Henkel y de sus productos de aseo y limpieza, con marcas como Orpil o Persil y artefactos de uso higiénico diario como el expendedor de jabón. 



Una de las pinturas en gran formato exhibidas en la inauguración era el mural titulado Der Mensch im Zeitalter der Nervosität (El hombre en la era del nerviosismo). 
Aquella fue la época de auge de las grandes concentraciones de personas en los suburbios, del crecimiento desproporcionado de las ciudades, del hacinamiento, de la histeria de masas. 
Hoy, cuando en Europa se han alcanzado estándares cotidianos de higiene incomparables, aún casi desconocidos hace 90 años, nos vemos sorprendidos por una crisis de salud pública no vivida por ninguna generación de los países ricos de Europa después de la II Guerra Mundial.
Si hace nueve décadas las crisis se dirimían en parte en la plaza pública, con grandes protestas y concentraciones de masas, hoy lo que se pide es recogerse.
Lo único que no varía es el nerviosismo. Y esto sólo parece haber empezado.     

Comentarios

Entradas populares